Escucha "La Frecuencia del Amor" de 528 Hz para reparar tu ADN (VIDEO)

528 Hz  El Tono Milagroso

Según el Dr. Leonard Horowitz, 528 Hertz es una frecuencia que es central en la "matriz musical matemática de la creación". Más que cualquier sonido previamente descubierto, la "frecuencia del AMOR" resuena en el corazón de todos. Conecta su corazón, su esencia espiritual, a la realidad espiral del cielo y la tierra. 

Reparación del ADN 

La frecuencia 528 relacionada con de la nota MI y se deriva de la frase “Mi-ra gestorum” que en latin significa milagro. Es la frecuencia de los Milagros y la Transformación. Sorprendentemente es la frecuencia exacta usada por los bioquímicos genéticos para reparar las estructuras de ADN que están rotas o dañadas, cuyo interior sano es un cristal de agua estructurada de seis lados 

Reparación del ADN se refiere a un conjunto de procesos mediante los cuales una célula identifica y corrige los daños generados en las moléculas de ADN que codifican su genoma. Los genomas están sujetos a los daños causados por agentes químicos y físicos que se encuentran en el medio ambiente (por ejemplo, UV y radiaciones ionizantes, los mutágenos químicos, toxinas de hongos y bacterias, etc) y por los radicales libres o agentes alcalinizantes endógenamente generados en el metabolismo. El ADN también se daña a causa de errores durante su replicación. 

El Dr. Lee Lorenzen, un bioquímico de renombre mundial que trabaja con métodos de cristalización del agua para rejuvenecer el ADN dice: "Yo estaba intrigado por las frecuencias de los códigos de curación. Esta frecuencia es bien conocida por los científicos que trabajan en la reparación del ADN'' El Dr. Lorenzen cree que esta frecuencia de 528 Hz puede ser beneficiosa para retrasar el envejecimiento. 

Reestructura el Agua 

Esta frecuencia también  se utiliza para reestructurar las moléculas del agua, y sabiendo que el cuerpo humano está compuesto en aproximadamente un 70% de agua, entonces podemos darnos cuenta los beneficios positivos en nuestra agua interna. 

Además podemos usar esta frecuencia para reestructurar las moléculas de agua que bebemos a diario, tan sólo exponiendo esta frecuencia en botellas de agua, jarras, vasos, etc. De esta manera el agua capta la información vibratoria y se energetiza y reestructura molecularmente. 

Los efectos de la frecuencia en una gota de agua fueron fotografiados siguiendo el método de Masaru Emoto, consiguiendo plasmar la belleza y forma hexagonal que esta onda transmite al agua tal y como se puede observar en la fotografía.